En Asturias se disfruta la diversidad de paisajes con todos los sentidos

España es un destino turístico por excelencia, en cada una de las regiones de su geografía, considerada como museo al aire libre. El Principado de Asturias en este contexto es uno de los más destacados por la diversidad de atractivos que presenta durante todo el año.

Asturias tiene mucho para disfrutar y es la combinación de naturaleza, gastronomía y cultura, en un entorno en el que predomina el verde de los paisajes, las montañas de Los Picos de Europa, atractivas playas, los monumentos que son la muestra de la historia del Principado y las especialidades asturianas para degustar que son marca registrada en España y en el mundo.

Esta región se caracteriza por los verdes intensos de sus paisajes, consecuencia de las lluvias en buena parte del año. En el relevamiento que realizamos, pudimos comprobar que en la ruta que comunica Madrid con Asturias, la zona que divide a las dos regiones en época de verano tiene una marcada diferencia de colores: pasa del amarillento en las ubicaciones aledañas a la capital por la falta de precipitaciones al verde profundo asturiano, sorprendente por lo abrupto del contraste al salir de una e ingresar en la otra.

Si bien cuenta con bellezas por donde se la mire, hay determinados lugares que merecen destacarse al iniciar este recorrido: el Parque Nacional de Picos de Europa en el corazón de la Cordillera Cantábrica, el Santuario de Covadonga, la ciudad de Gijón y su admirable Jardín Botánico, las Termas Romanas, la Cimadevilla, la belleza de la zona histórica de Avilés, Oviedo (la capital del Principado de Asturias) que cuenta con sitios declarados por UNESCO como Patrimonios de la Humanidad, los centros de mar de Llanes, Luarca y Cudillero, sin perder de vista que un viajero no puede irse de Asturias sin probar la sidra, la fabada y el queso Cabrales.

Es fascinante disfrutar Asturias “desde adentro” pasando unos días en puntos externos a las grandes ciudades, en lugares que están fuera de lo cotidiano para conocer el territorio más profundamente. Como España tiene un magnífico desarrollo de carreteras teniendo un auto a disposición se hace rápido llegar a las otras localidades que se pretenden conocer. La experiencia del viaje hecha por El Diario de Turismo consistió en contratar una casa en Carrio, un caserío cercano a Cangas de Onís, de pocas viviendas y muy antiguas (la nuestra era de más de 200 años en perfecto estado de mantenimiento), al que se llegaba por un camino montañoso con curvas y contracurvas al que sólo podía acceder un vehículo por el ancho de la ruta, ascendiendo hasta los 400 metros sobre el nivel del mar. Una postal de esta aldea la constituyen los hórreos: pequeñas construcciones de madera elevadas del suelo sobre pilares, utilizadas para guardar alimentos evitando la humedad y el contacto con animales de toda especie. Más allá de su función inicial, hoy dan la impronta característica del trabajo agrícola y la conservación de sus frutos. El recuerdo de las mañanas al despertar es imborrable: al abrir las ventanas veíamos las nubes a nuestra misma altura, como si estuviésemos inmersos en ese velo húmedo que sólo permitía ver lo inmediato, orientados solamente por el sonido de cencerros de las vacas pastando a pocos metros en posición de 90 grados y con la escenografía de los Picos de Europa. Imágenes que se mantendrán en la memoria a través del tiempo…

Asturias cuenta con casi setenta sitios de protección de la Naturaleza, un tercio del territorio del Principado, entre reservas y monumentos naturales, paisajes protegidos, parques nacionales y Reservas de la Biósfera declaradas por UNESCO, lo que da cuenta de la conciencia medioambiental y la importancia que le dan a la conservación y protección de su biodiversidad.

Precisamente, empezamos nuestra travesía por el acceso del Oriente de Asturias, desde Cangas de Onís hacia Los Picos de Europa, Parque Nacional con acceso desde cualquiera de las tres provincias que lo albergan (Cantabria, León y Asturias). La recomendación es ver la inmensidad y la belleza de esta zona de España recorriendo cuatro miradores naturales que están localizados en diferentes lugares: el Pozo de la Oración (en Cabrales) desde donde se admira el pico Naranjo de Bulnes; el Mirador de la Reina, a mitad de camino entre los Lagos y el Santuario de Covadonga, todos fantásticos lugares que no se pueden dejar de conocer. Hay dos miradores más, La Collada, a 800 metros de alto en la zona de Amieva, y el Mirador de Fito en la localidad de Parres, que tiene un espacio donde se tiene la impresión de estar volando.

Podemos identificar algunos tips que son características especiales de Asturias que resumen lo más destacado y para tomar en cuenta.

• Asturias tiene dos paisajes bien determinados turísticamente hablando: la zona costera del Mar Cantábrico y el interior de la región. Uno de los lugares que no se pueden dejar de visitar en el borde ribereño es Ribadesella, por sus vistas y también por el atractivo de la Ruta de los Dinosaurios, donde se puede observar las expresiones de vida de estos animales históricos. Otras de las localidades destacadas de Asturias son Llanes y Gijón, ciudad, esta última, de intensa actividad turística y con una geografía en la que conviven los acantilados y las playas, como las de Estaño y Serín. En este recorrido se encuentra Candas y su Mirador de la Formiga hasta Cabo de Peñas. Posteriormente se puede divisar el Mirador del Espiritu Santo hasta llegar a Cudillero y al Cabo de Vidio. Adentrándonos en el territorio, la imagen refleja pueblos, valles y rías en una mágica conjunción. Está el Parque Histórico del Navia, escenografía integrada por bosques y construcciones muy antiguas. Cerca de allí está el Mirador de San Esteban donde se puede admirar un fantástico valle. Más al oeste está la Comarca Oscos-Eo con varios miradores como el de Mirandilla (en Castropol) donde se puede tener una espectacular vista de la ría del Eo. Las vistas desde miradores en altas zonas de la montaña son paseos “obligados” para disfrutar Asturias desde una visión especial y se tiene la sensación de estar cerca de las nubes.

• Recorrer el casco histórico de Oviedo, admirar sus edificios, la Catedral, los parques, los palacios, visitar la Plaza del Fontán, recrearse la vista y conocer más sobre su historia
• Gijón, centro industrial de Asturias, es una ciudad con todos los elementos que requiere un viajero: monumentos y edificios históricos como el Ayuntamiento, la Torre del Reloj, las Termas Romanas. La playa de San Lorenzo es la más reconocida y cuenta con un centro comercial con las mejores marcas.
• La sidra es la bebida típica de Asturias y ningún viajero puede pasar por aquí sin probarla y sin descubrir la particular forma de servirla: el arte del “escanciado” consiste en un ritual para servir la sidra desde lo alto, chocando el líquido con las paredes del vaso, para hacer explotar las burbujas de la sidra, y así logra luego el mejor resultado en la boca. El vaso de sidra clásica tiene unos 12 cm de alto, 9 de boca y 7 de base, para logar la evaporación deseada. Se sirve en “culines”o “culetes”, que es la cantidad de sidra que se escancia en un vaso para ser ingerida de una sola vez. La Denominación de Origen Protegida “Sidra de Asturias”, que certifica la calidad y el origen de la misma. Durante la última semana de agosto de cada año, en Gijón se celebra la Fiesta de la Sidra Natural, dedicada a este noble brebaje y al arte de su escanciado como un auténtico homenaje a la bebida característica de estas tierras.
• La gastronomía de Asturias tiene productos característicos que habitantes y turistas saborean. Nobles materias primas dadas por las excelentes condiciones naturales del entorno, hacen de sus productos las delicias de todo comensal. La faba asturiana está amparada por Indicación Geográfica Protegida (I.G.P.) certificando su origen y calidad. Es el ingrediente primordial de la fabada asturiana y las fabes con almejas, entre otros platos. Otras productos destacados son las carnes y embutidos, los productos del mar Cantábrico, la bollería con almendras o nueces, postres como la cuajada o el arroz con leche asturiano, y los quesos como el Cabrales, el de Los Beyos o el queso Gamonedo de Cangas de Onís, localidad donde cada 12 de Octubre se celebra el Concurso Exposición de los Quesos de los Picos de Europa.
• Una alternativa muy interesante para conocer Asturias según la temática de preferencia, es seguir las distintas rutas turísticas de las que forma parte, como las Rutas Jacobeas peregrinando hacia Santiago de Compostela (Camino de la Costa, Camino de Santiago primitivo, Camino Francés y Camino del Salvador). Ruta Vía de la Plata (huella romana del siglo VII a. de C., sendero histórico que utilizaron las tropas romanas en su avance hacia el norte, desde Sevilla a Gijón). Ruta de las Reliquias (desde Puerto Ventana hasta la ermita de San Antonio en Pedroveya en Quirós; recorrido a pie de 16 hs y casi 40km transitando parte de la historia asturiana de la Edad Media). Caminos de Peregrinación a Covadonga, (con distintos puntos de partida: Oviedo, Gijón, Llanes, Muñigo). Combinando turismo y gastronomía con las fiestas relacionadas: Ruta de la Sidra, Ruta de los Sabores de Campo, Ruta del Vino de Cangas, Ruta de los Quesos y la Lechería, Ruta de los Sabores del Mar.
• En el Oriente de Asturias hay numerosas cuevas con arte rupestre paleolítico: Cuevas de La Loja, Tito Bustillo, El Pindal, El Buxu, Covaciella, La Peña de Candamo, entre otras. Hay otros monumentos megalíticos como el dolmen de la Santa Cruz (en Cangas de Onís). Visitar el Museo Jurásico de Colunga o el Parque de la Prehistoria de Teverga, que es un proyecto de equipamiento cultural con el fin de dar a conocer el arte del Paleolítico Superior.
• Hay manifestaciones artísticas de diversas épocas: del período Romano se destacan las termas de Campo de Valdés en Gijón. Innumerables ejemplos del Prerrománico y arte Medieval de toda Asturias han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por UNESCO (en Oviedo, por ejemplo: San Julián de los Prados, Santa María del Naranco, San Miguel Lillo). El Románico está presente en territorio asturiano con numerosas iglesias y monasterios, como Santa María de Valdediós (Villaviciosa), San Pedro de Villanueva (Cangas de Onís), San Antolín de Bedón (Llanes), San Pedro de Teverga, entre otras. El período Gótico tiene su principal exponente en la Catedral de San Salvador de Oviedo (s. XIII a XVI); la Iglesia Santa María de Llanes, colegiata Santa María La Mayor de Salas, iglesia de San Pedro de Cudillero. De esta misma época hay importantes obras civiles, torres y fortificaciones. Del Renacimiento, se destacan la Universidad de Oviedo, Palacios de Campos Valdés y de Jovellanos en Gijón, el Palacio de Toreno en Cangas del Narcea. Del siglo XVII se destacan los palacios urbanos de Avilés y de Oviedo. Del s. XVIII, sobresalen el Palacio de Camposagrado y la Casa de los Llanes, de Oviedo; el Palacio de Revillagigedo de Gijón. Un magnífico ejemplo de la arquitectura del siglo XX es la Universidad Laboral de Gijón, construída en los años ‘40.
• Hay muchas alternativas para realizar deportes y actividades al aire libre, ecoturismo y turismo aventura: recorrer Asturias en bicicleta, haciendo senderismo, escalando, con el mar y las montañas como fondo.
• En Asturias hay múltiples opciones de alojamiento de todas las categorías y estilos, tanto en hoteles de ciudad como en sitios rurales enclavados en entornos naturales con vistas inigualables.

Una fiesta muy conocida mundialmente es el Descenso Internacional del río Sella que se realiza el primer sábado de agosto, con un recorrido de unos 20 Kms. conjugando deporte con entretenimiento, navegando aguas abajo desde Arriondas hasta Ribadesella. Igual se pueden probar las canoas fuera de esta festividad y atreverse a cubrir esos kilómetros con una continuada remada; hay empresas que organizan este descenso turístico. Es una actividad que exige su esfuerzo, podemos dar fe porque en este viaje lo hemos realizado, pero la sensación de haberlo logrado no se compara con nada!

 

Hay ciudades que recomendamos al viajero conocer al visitar Asturias:

Arriondas

Es una zona de valles que conviven con los ríos Piloña y Sella, buena cantidad de arroyos y con montañas como entorno de un paisaje fantástico. El turista activo tiene un lugar ideal para recorrer senderos, ya sea caminando o en bicicleta, visitando miradores como el de Fitu desde donde se puede divisar la escenografía del Parque de Los Picos de Europa y el mar Cantábrico. Aquí se pueden realizar otras actividades deportivas como pesca (en especial de trucha y salmón), deslizarse por el río Sella con canoas (como ejemplificamos líneas arriba) y es un lugar para los amantes de la caza.

Para quienes les interesa otro tipo de actividad para realizar y visualizar, les recomendamos visitar los yacimientos prehistóricos como la Cueva de Taragaño y construcciones como iglesias, casonas, molinos, llenas de encanto y con siglos de leyenda. Tal es el caso de las “casonas de indianos”, elegantes edificios construidos por españoles que triunfaron en América hacia fines del siglo XIX y principios del XX, que una vez enriquecidos retornaron y levantaron palacetes y otros edificios, muestra de haber “hecho la América”.

Avilés

Antigua villa marinera y campesina, es actualmente la tercera ciudad en importancia de Asturias, con un desarrollo industrial y siderúrgico que generó progreso demográfico. Es también uno de los puertos pesqueros más importantes de la región. A esto se suma su rica historia, con el ejemplo de su casco urbano que fue condecorado como Conjunto Artístico-Histórico Monumental.

El viajero que llega a Avilés no puede dejar de recorrer las calles del centro histórico (muchas de ellas cerradas al tráfico), admirar sus joyas arquitectónicas, disfrutar sus antiguas construcciones. En este sentido, ofrecemos algunas para tomar en cuenta: Iglesias como las de Tomas de Canterbury, la antigua de Sabugo que es del siglo XIII, los palacios Camposagrado y Valdecarzana, la plaza España, el Ayuntamiento, el Palacio de Ferrera, pasear por las calles Rivero y Galiana, o por el parque de Ferrera. A estos añosos edificios se le suma el moderno Centro Cultural Internacional Oscar Niemeyer, emplazado entre la Ría y el Casco Histórico de la ciudad, al que se accede desde el Puente San Sebastián.

Gijón

Es una ciudad con condimentos de modernidad, gran urbe, destacada historia que se protege, todo muy enlazado al mar, a los acantilados, las playas y al cuidado del medio ambiente. En nuestro recorrido hemos utilizado el bus turístico es una buena forma de conocer lo más posible en poco tiempo de esta localidad que ofrece tanto. Sus construcciones tienen la reminiscencia del paso de los romanos por esta zona de España.

En los alrededores del cerro Santa Catalina se establece el barrio de pescadores Cimadevilla y desde lo más alto de la elevación montañosa se logra una vista inmejorable de la Costa Verde y de las aguas del Cantábrico. Hay una zona muy visitada por los turistas y por los habitantes que es la delimitada por el muelle deportivo y las playas de San Lorenzo, para realizar caminatas, disfrutar del aire marino y los bares costeros, pero también llama la atención de quienes la recorren las construcciones, los edificios románicos y las viviendas de los pescadores.

Del lado opuesto a la playa San Lorenzo están los Parques Isabel La Católica y Parque Inglés Inglés. En los alrededores se ubica el Parador de Turismo de Gijón, donde se puede saborear exquisiteces de la comida local (merluza con cocochas, caldereta de marisco, pote asturiano, arroz con leche, casadielles y, por supuesto, fabada. Todo acompañado con sidra). En esta parte de Gijón se puede visitar también los Museos de la Gaita, Etnográfico, del Ferrocarril y Hórreo. Más allá está una de las primeras ciudades jardín de España, Somió, en donde está la Fundación Valle. Asimismo el paseo se puede completar con el Puerto Industrial y el parque arqueológico Campa de Torres.

Un lugar para no dejar de visitar es la plaza Jovellanos, donde se encuentra el Museo Casa Natal del famoso escritor, que data del siglo XVI, en la que se pueden ver obras de escultores y pintores y en un espacio contiguo, el sepulcro de esta figura reconocida nacida en Gijón. En el recorrido es recomendable visitar la Plaza Mayor y visualizar la construcción del Ayuntamiento que es del siglo XIX.

Otros lugares que hay que apuntar para conocer lo más destacado de Gijón son: el Monumento a Pelayo, el Museo Barloja (con pinturas y esculturas), la Colegiata de San Juan Bautista, los Palacios Valdés (del siglo XVI) y Revillagigedo ( del siglo XVIII), las termas Romanas de Campo Valdés (siglos I y II), la iglesia de San Pedro.

La zona moderna de la ciudad tiene la imagen de estar rodeada de verde y lugares con naturaleza, entre los que se destacan los Jardines de la Reina, del Náutico, de Begoña. Es un buen programa recorrer la zona donde hay locales comerciales, bares y sidrerías, pasear por calles como Menéndez Valdés, Uría, Corrida.

Gijón, con intensa actividad turística y con una geografía en la que conviven los acantilados y las playas, como las de Estaño y Serín. En este recorrido se encuentra Candas y su mirador de la Formiga hasta Cabo de Peñas. Posteriormente se puede divisar mirador del Espíritu Santo hasta llegar al Cabo de Vidio.

Cabo de Peñas

Es una localidad costera en forma de brazo sobre el mar que se caracteriza por estar en la zona más boreal de España, por tener hermosas playas, un faro alegórico que tiene más de 160 años y un reconocimiento como Paisaje Protegido.

Cangas de Onís

Fue capital del reino asturiano, aquí se inició la reconquista peninsular efectuada por Don Pelayo en S. VIII. Está sobre el valle, rodeado de los ríos Güeña y Sella y el lugar emblemático de esta ciudad lo podemos encontrar en el Puente Romano sobre el río Sella, monumento pronunciado como histórico en 1931 que tiene una réplica de la Cruz de la Victoria. Otro de los atractivos es la Ermita Santa Cruz, construida en el año 437 y reedificada en el 737 para custodiar la famosa Cruz. En su interior se encuentra el dolmen, monumento funerario del 4000 a.C. También podemos mencionar al Monumento a Don Pelayo, la Iglesia de Santa María de Cangas, San Pedro de Villanueva, el Palacio Cortés, el Palacio Casa Dago (alberga las oficinas del Parque Nacional de los Picos de Europa), el Ayuntamiento y la Capilla de San Antonio, con la imagen del patrono de la ciudad de Cangas de Onís.

Cercana a esta ciudad podemos visitar La Cueva del Buxu, con pinturas y grabados de arte rupestre, que puede ser visitada sólo con cita previa.

A 11 km se encuentra otro sitio imperdible para conocer: el Real Sitio de Covadonga, uno de los centros más cautivantes y más visitados de Asturias, que forma parte del Parque Nacional de los Picos de Europa. Aquí Pelayo derrotó a los árabes, y fue proclamado rey. En el monte Auseva se encuentra la Santa Cueva, el manantial con su estanque y Fuente de los Siete Caños. A la gruta se accede por una escalera de 101 peldaños, que los peregrinos suelen subir de rodillas cumpliendo promesas a la Virgen de Covadonga llamada “La Santina” (patrona de Asturias), en el interior de la capilla neorrománica (obra del arquitecto Luis Menéndez Pidal), y próxima a las tumbas de dos reyes españoles: Pelayo y Alfonso I. La capilla original era de madera, pero a raíz del incendio del año 1777 se perdió al igual que la imagen de la Virgen y sus joyas. La imagen que actualmente se venera data del siglo XVI.

Junto a la Santa Cueva está el Monasterio de San Pedro y Casa de Ejercicios espirituales. Cerca, la Basílica de Santa María la Real de Covadonga, diseñada por Roberto Frassinelli y terminada por Federico Aparici. Es de estilo neorrománico, hecha en piedra caliza rosa obtenida de las montañas de Covadonga.

Completan el complejo el Museo del Real Sitio de Covadonga, la estatua de don Pelayo, la Campanona (campana de 4 toneladas de peso y 3 metros de altura, realizada en 1900), y el obelisco que recuerda el sitio donde Pelayo fue coronado Rey.

Desde aquí también se accede al circuito de los Lagos de Covadonga, dentro del Parque Nacional de los Picos de Europa. Un bello camino rodeado de un paisaje maravilloso, verde, montaña y cielo, 12 km de travesía hacia el lago Enol y, separados por la loma de la Picota, el lago Ercina, ambos de origen glaciar. El Mirador de la Reina ofrece una panorámica inigualable de este fascinante lugar. Más adelante están las minas de Buferrera y el Centro de Interpretación del Parque, con una exposición permanente sobre el Parque Nacional de los Picos de Europa.

Cudillero

Es un pueblo pintoresco en la zona del puerto, de casas coloridas y suspendidas en los acantilados. Se puede apreciar su agraciada geografía en varios miradores como La Atalaya, el Pico, el camino al Faro, la Garita. Los lugares que se recomiendan conocer son los bares en los que se vende pescado, la construcción con más años en Cudillero, la capilla del Humilladero, y la iglesia gótica del siglo XVI.

Ovetum

Es una ciudad que tiene su historia. Sus inicios datan del siglo VIII, tiene un centro de estilo prerrománico, es Patrimonio de la Humanidad y fue capital de Asturias. Pero también se la conoce por sus paisajes, su naturaleza, sus espacios para llevar a cabo prácticas deportivas y es una de zona con mejor gastronomía.

Oviedo

Ciudad capital del Principado de Asturias, de gran importancia también en España, por su enorme aporte a la cultura, la arquitectura y la historia.

Hay 200 mil habitantes, tiene una universidad pública y prestigiosa, en especial en medicina y odontología.

El casco antiguo descubre los orígenes de la ciudad en el siglo VIII, con parte de la muralla y la ciudad medieval, paso obligado para los peregrinos franceses que hacían el Camino de Santiago.

La zona de la Catedral es un buen lugar para dar inicio a un recorrido posterior a pie por el casco histórico, visitando la Capilla de La Balesquida, Casa de los Llanes, Palacio de la Rúa o Marqués de Santa Cruz (el edificio civil más antiguo de al ciudad); luego trasladarse a la Plaza Porlier y alrededores, pasando por la Universidad de Oviedo, el Palacio de Camposagrado, el Palacio Toreno. En la Plaza del Fontán (con su característica fuente manantial) se encuentra el Mercado de Abastos, cercano al Palacio del Marqués de San Félix. En esta zona hay numerosas sidrerías y restaurantes para deleitarse con la tradicional cocina asturiana.

Hay monumentos nacionales declarados Patrimonios de la Humanidad, claro ejemplo del prerrománico, como San Miguel de Lillo, San Julián de los Prados, Santa María del Naranco y Santa Cristina de Lena.

En la capilla de San Miguel están alojadas la Cruz de los Ángeles, de la Victoria y el Arca Santa, imágenes que están en los escudos de Asturias y de Oviedo. Quien recorre esta ciudad no puede dejar de visitar los Museos de Bellas Artes (ubicado en el Palacio de Velarde y Casa de Oviedo-Portal) con un rico patrimonio del arte escultórico y pictórico español; el Museo Arqueológico de Asturias, la iglesia de San Tirso, recorrer los parques de Alfonso II el Casto, de la Catedral, la plaza y el mercado de Fontan, el Campo de San Francisco, la plaza Escandalera, la plaza de Trascorrales en Cimadevilla, el Teatro Campoamor (donde se entrega el premio Príncipe de Asturias, el más importante de España, de ciencias y humanidades), el Hotel De La Reconquista (antes Hospicio Provincial, reinaugurado en 1973, hoy un hotel Meliá 5 estrellas), el Centro de Arte Moderno.

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FUENTE: EL DIARIO DE TURISMO