La gestión de la calidad, esencial para la competitividad de los destinos turísticos
Los indicadores y procesos de gestión de la calidad son instrumentos esenciales para la competitividad de los destinos turísticos, según la Conferencia de la OMT sobre Gestión de la Calidad, celebrada la semana pasada en Bucarest (Rumania).
En ese sentido, los participantes en la Conferencia reclamaron que se adoptara un enfoque integrado en materia de gestión de la calidad a título de prioridad de la planificación estratégica a largo plazo de las organizaciones de gestión de destinos de ámbito nacional y subnacional.
El enfoque integrado de gestión de la calidad de los destinos contribuye a mejorar la imagen del destino, mejora el marco legislativo y reduce al mínimo los problemas operacionales.
«Vivimos en un sector cada vez más competitivo. Las normas de calidad sirven a las partes interesadas de marco de orientación para mejorar sus operaciones y servicios en el conjunto de la cadena de valor del turismo a fin de crear una experiencia turística completa y positiva», dijo Taleb Rifai, Secretario General de la OMT.
Costin Grigore Borc, Viceprimer Ministro y Ministro de Economía, Comercio y Relaciones con el Entorno Empresarial de Rumania, dijo que «los cambios dinámicos en el mercado mundial del turismo exigen una transformación cualitativa de prácticamente todos los segmentos turísticos de cada destino. Para que sobrevivan los destinos turísticos, deben seguirse de cerca las tendencias relativas a la mejora constante de la calidad de la oferta turística».
«El turismo, que tiene carácter multisectorial, ha sido y sigue siendo vulnerable a las turbulencias del mercado y las crisis económicas. Sin embargo, ha conseguido resistir a la crisis económica mundial mejor que la mayoría de los demás sectores, reactivarse como pocos sectores y recuperarse con rapidez de episodios de debilidad pasajera», señaló Anca Pavel-Nedea, Presidente de la Autoridad Turística de Rumania, con motivo de la inauguración de la Conferencia.
La Conferencia, que se centró en la «calidad de los destinos» como estadio más avanzado de la «calidad de los productos o servicios», sirvió de plataforma para dar a conocer iniciativas y buenas prácticas en materia de gestión de la calidad de los destinos costeros, las zonas protegidas, los destinos de balneario y de salud, los destinos urbanos y los destinos del patrimonio cultural.
El Consejo Ejecutivo de la OMT aprobó en su 103ª reunión, celebrada el pasado mayo en Málaga, la siguiente definición de calidad de un destino turístico, propuesta por el Comité de Turismo y Competitividad de la OMT: «La calidad de un destino turístico es resultado de un proceso orientado a atender todas las necesidades de productos y servicios turísticos, los correspondientes requisitos y las expectativas del consumidor a un precio aceptable de conformidad con condiciones contractuales aceptadas mutuamente y con factores subyacentes implícitos como la seguridad, la higiene, la accesibilidad, la comunicación, la infraestructura y los servicios y comodidades públicos. También presenta aspectos relativos a la ética, la transparencia y el respeto del entorno humano, natural y cultural».
FUENTE: OMT – ORGANIZACIÓN MUNDIAL DEL TURISMO