Punta Tombo: romance pingüinero.
Si escuchaste hablar de Puerto Madryn, la Península de Valdés o el Dique Florentino Ameghino, seguramente habrás escuchado también de Punta Tombo: una reserva natural de 210 hectáreas de estepa chubutense donde anidan aproximadamente un millón de pingüinos de Magallanes entre otras especies de animales.
Siguiendo la costa de Chubut hacia el sur, a unos 80 kilómetros de Rawson, encontrarás uno de los santuarios naturales más estudiados por los amantes de la fauna y flora patagónica y mundial.
La Reserva Provincial Punta Tombo desde septiembre a abril recibe a más de un millón de pingüinos magallánicos que buscan la aprobación de una hembra, ya asentada en algún hueco de la tierra, para el apareamiento. Los viajeros, que arriban por tour o individualmente, caminan entre estas hermosas y confiadas aves (se acercarán sin el menor temor), aunque se les exige no tocarlas.
Además de los pingüinos y decenas de otras especies de aves, guanacos y ovejas, el paisaje en sí es simplemente cautivador. El Mar Argentino rodea su costa rojiza y pedregosa y la meseta patagónica deja una sensación ambivalente de desierto y verde.
En el caso de que Chubut sea tu elección para la primavera, verano u otoño, no te pierdas la maravilla que es Punta Tombo. El contacto prácticamente directo con su fauna es inexplicable y de seguro te llevarás a casa un recuerdo eterno.
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FUENTE y FOTOS: MARTÍN MIÑO
