La historia del destino caribeño que Cristóbal Colón encontró por accidente
Ubicadas en un entorno tropical incomparable, con una peculiar combinación de playas bañadas por el sol y tranquilas aguas de color turquesa, las Islas Caimán son reconocidas mundialmente por su fina gastronomía, la práctica de snorkel y buceo a lo largo y ancho de las tres islas que componen el destino. Pero, ¿cuál es el origen que dio lugar a uno de los destinos más sofisticados del Caribe?
Las islas fueron avistadas por primera vez por exploradores europeos el 10 de mayo de 1503, debido a un viento que desvió de rumbo el barco de Cristóbal Colón. En su cuarto y último viaje al “nuevo mundo”, Colón iba en camino a la isla La Española, lo que actualmente conocemos como Haití y República Dominicana. Durante el trayecto, su barco fue empujado hacia “dos islas muy pequeñas, repletas de tortugas galápagos que parecían como pequeñas rocas”, así fue como estas islas fueron denominadas como Las Tortugas. Las dos islas avistadas en aquel entonces fueron Cayman Brac y Little Cayman, dos de los territorios que, junto con Grand Cayman, completan el trio que hoy conocemos como Islas Caimán.
Unos años después, a raíz de un mapa de 1523 que mostraba a las tres islas, se les daba el nombre de “Lagartos” que poco después se transformó en “Caimanes”. Este proviene de la nomenclatura que utilizaban los indígenas caribeños para el cocodrilo marino que habitó las islas. Este nombre, o una variante de él, es el que conservaron desde aquel entonces. La palabra eventualmente se transformó en Caimán y se añadió la palabra “islas”, para nombrar al famoso destino del Caribe como “Islas Caimán”.
Primeros pobladores que se asentaron
De acuerdo a los registros, el primer visitante inglés en llegar fue el Sir Francis Drake en 1586. Los primeros pobladores fueron dos colonizadores del ejército disuelto de Oliver Cromwell que llegaron a finales de la década de 1650 con el objetivo de cazar tortugas, uno de los animales más icónicos que aún representan hoy al destino. Isaac Bodden, el primer habitante permanente registrado de las Islas Caimán, nació en Grand Cayman alrededor del año 1700. A partir de allí, una variedad de personas de distintas procedencias y culturas se asentaron en Islas Caimán, entre los que se encontraban marineros sobrevivientes de los naufragios y esclavos.
Las primeras poblaciones registradas de las Islas Caimán datan del año 1773, cuando se estimaba que un total de 450 personas vivían en las islas. Los primeros asentamientos registrados se encontraron en Little Cayman y Cayman Brac durante el período que comprende los años 1833 a 1840. Otros pobladores se mudaron a Grand Cayman, ya que les ofrecía una mejor protección del ataque de los navíos españoles, ya que los pobladores podían ocultarse en el bosque cada vez que fuera necesario. Asimismo, en Grand Cayman había más tierras para cultivar. Como resultado, los asentamientos en East End y Bodden Town fueron fundados durante el mismo periodo.
El rojo y azul definieron la identidad
Con una población estable ya asentada en sus imponentes playas, rodeadas de un entorno natural con flora y fauna autóctona, se creó uno de los símbolos que identifican al territorio: su detallado escudo de armas donde puede leerse la frase “he hath (hoy “have”) founded it upon the seas” (“lo fundó sobre los mares”). Poco después, en 1959, se diseñó su característica bandera incluyendo el escudo. Existen dos versiones de la bandera que los visitantes verán presentes en distintos lugares del destino: una azul para usos terrestres y una roja para usos marítimos; ambos diseños están basados en la insignia roja y azul británicas.
Un viaje en el tiempo
Varios siglos después, con un exquisito legado histórico y cultural que fue dejando su huella en cada una de las tres islas, las Islas Caimán proponen un recorrido cultural a cada paso por la inquietante historia del Caribe. Puede verse reflejada a cada paso la pasión por su historia en los distintos productos fabricados por las compañías locales.
Los viajeros de todo el mundo que hoy llegan a su territorio tienen la posibilidad de combinar distintos recorridos y caminatas por cuenta propia con excursiones, visitas guiadas y lugares como el Cayman Islands National Museum en pleno centro de George Town, capital de Islas Caimán. Otro recorrido disponible se desarrolla en torno a The Wreck of the Ten Sail. En 1974, diez barcos se destruyeron pero los caimaneses brindaron toda la asistencia posible, salvando muchas vidas. Los visitantes pueden visitar el monumento conmemorativo en ese lugar; todos los barcos encallados en las Islas Caimán están protegidos por Ley como parte de su patrimonio marítimo.
Otra parada obligada para los amantes de la historia es Pedro St. James, una impresionante casona restaurada que nos transporta al siglo XVIII a solo veinte minutos en auto del centro de la ciudad. Con un entorno geográfico y natural de película, los expertos locales nos sumergirán por un rato en un verdadero sueño acerca de la rica historia fundacional del Caribe.
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FUENTE y FOTOS: LINKS WORLD GROUP