Joaquín Fava Aguiar, emprendedor del Fin del Mundo
A Ushuaia la descubrí como turista, y me enamoró su calidad de vida y la oportunidad de desarrollo. De pequeño fui autodidacta y mi abuelo me inculcó la cultura del trabajo, la única manera de ayudar verdaderamente al prójimo.
El 15 de febrero de 2004 salí a las 14.15hs desde Buenos Aires en mi moto Honda Africa Twin 750, ruta 3 hasta el Fin del Mundo!
Tenía 2 objetivos este viaje:
Participar en el (Bun Burner 2500K) y realizar 2,500 kilometros en menos de 36 horas y el 2do objetivo y más importante llegar a la ciudad más austral de mi Argentina, para luego subir por la 40 hasta Aluminé.
A Ushuaia la iba a disfrutar como la figurita difícil y vivirla como turista. Era el 1er destino de un montón marcados en mi mapa (sí, en aquella época viajabamos con los mapas de rutas en papel, que hermosoooo).
A Ushuaia la tenía agendada solo por 3 días, recomendaciones de un amigo de Buenos Aires agente de viajes, (él no tenía idea ni cómo se pronunciaba la ciudad y menos, recomendar la cantidad de días para no perderme nada).
Así fue que esos 3 días pasaron volando, y casi no tuve tiempo de disfrutarla.
Una noche antes de irme al próximo destino, algo no me dejaba dormir.
Y en mi cabeza rondaban imágenes de gente descendiendo de los cruceros, grandes mejoras a realizar en el servicio turístico, la gastronomía que no abría sus puertas hasta las 11:00 de la mañana (que en realidad se preparaban para el almuerzo), no se podía desayunar si no estabas alojado en algún hotel 4 o 5 *****. Los hoteles tenían una atención básica, familiar, muy amable y predispuesta.
Yo venía de un background en la organización y producción integral de eventos corporativos, estaba acostumbrado a que las cosas se hacen bien y una sola vez.
Instintivamente detecto en Ushuaia una gran oportunidad, y empecé a soñar en grande.
Mientras estiraba esos 3 días en Ushuaia, armé el bosquejo de un plan de negocio.
Decidí buscar tierras para armar un complejo de cabañas de alta gama.
Ideólogo, creador y constructor del primer complejo de Spa privado en el mundo.
Un concepto de poco para pocos, apuntando a parejas que gustaran de disfrutar de plena intimidad con la mejor vista del fin del mundo.
Así fue que respetando la arquitectura tradicional de esas soñadas cabañas Suizas en tronco piedra y madera, en sólo dos años construí e inauguré Finisterris Lodge Relax & Spa.
Finisterris Lodge era un producto muy exclusivo y apuntado a un target de alta gama.
Me dejó un aprendizaje enorme al ver que había un gran mercado en el consumo masivo, que quería acceder a este nivel de servicio, pero no podía costearlo..
Y así visualizo una nueva gran oportunidad online, comenzando en el 2009 la comercialización de servicios turísticos de Info De Ushuaia ®.
Dos años más tarde, el volumen comienza a incrementarse y no quería perder el dominio del servicio, quería que la gente siempre se llevara lo mejor, aquello tal vez que no disfruté yo en mis 3 1ros días de turista en la ciudad.
Ello me llevó a brindar servicios propios con vehículos, guías y hasta oficinas comerciales, para garantizar la calidad de servicio..
Amo cada uno de mis proyectos, soy el niño soñador que se crió con lo justo, y en un constante instinto de supervivencia, donde no hay límites.
Disfruto el proceso, soy un feliz agradecido a la cultura del trabajo.
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FUENTE y FOTOS: INFO DE USHUAIA