Dos cerros en Otoño

Cerro Otto y Cerro Campanario. Muy cerca, mucho para hacer.

En minutos usted puede estar disfrutando de pantallas de 360 grados, absolutamente naturales, con calidad de súper alta definición. Y sentado, tomando algo. Con su familia, disfrutando del espectáculo mas increíble y emocionante que haya vivido. Y repetir esa experiencia, también increíble, en otro cerro, a poca distancia. Todo en Bariloche. Si lo desea, en el mismo día.

Pregunte a cualquiera en Bariloche como llegar al Cerro Otto. Es muy fácil: Avenida Pioneros kilómetro cinco. Disfrute desde el inicio sintiéndose amablemente atendido por todo el personal del Complejo Turístico Teleférico Cerro Otto. Va a subir por unas góndolas panorámicas, que en doce minutos recorren 2100 metros. Desciende dentro del complejo. Lo primero que va a encontrar para asombrarse es una galería de arte. Lo va a recibir la imponente escultura del David, en tamaño natural. A su izquierda esta el Moisés y a su derecha La Piedad. Las tres réplicas de las obras de Miguel Angel son calcos exactos. Luego deténgase un instante a leer y entender la obra de Don Boris Furman. Allí se dará cuenta de lo que significa estar en el Cerro Otto, qué es la Fundación Sara María Furman y como el dinero recaudado se dona a obras benéficas. La confitería giratoria lentamente va completando un giro, que le permite a usted haber dado una vuelta completa. Diviértase, saque fotos panorámicas, imagínese estar sobre o dentro de una nube, señale los cerros y adivine su nombre. Todo esta permitido para construir un recuerdo. Y no deje de tentarse con el menú de platos y dulces que le ofrecen en la altura.

Fuera del complejo puede realizar caminatas guiadas por el bosque, jugar, sacarse fotos, cruzar el puente colgante o divertirse en el funicular.

Cerro Campanario

Tomar Bustillo hasta el kilómetro 17 y medio. Y subir por la aerosilla. El ascenso es cómodo y placentero. Uno va subiendo lentamente, descubriendo especies de árboles y arbustos que tienen sus carteles. Casi como un juego. Un dato: cuando inicie el segundo tercio de ascenso mire hacia atrás para comenzar el verdadero asombro Realmente es difícil describir la sensación de estar ahí. Hay tres niveles de altura en el sector del restaurante. Recorra todos. Por mas que le parezca que no hay diferencia, va a encontrar que si la hay. No olvide también recorrer la zona de piedras, a la izquierda de las sillas, para encontrar imágenes diferentes. Usted esta ahora en una de las vistas mas espectaculares que existe en el mundo. En la confitería pida el postre «Isla Flotante». O si hace frío, un coñac o un chocolate caliente.

Tenga mucho cuidado de guardar batería para la cámara de fotos a la hora del descenso. Va a bajar en una silla que mira de frente el Brazo Campanario del lago Nahuel Huapi. Entre el brazo y el lago está la Península San Pedro. El brazo es un espejo de agua tranquilo. Usted se imaginará remando por ese sector. Cuando llegue a la base, va a querer volver. Vuelva. En cualquier época del año. Siempre va a tener la misma sensación. Cuando crea que ya no puede asombrarse, cuando quiera volver a ser un niño, cuando quiera tener una respuesta a cualquier pregunta, visite el Cerro Campanario.

FUENTE: EMPROTUR -Bariloche